martes, 9 de diciembre de 2014

Abraham Salloum Bitar: Escuela de dudas

e a plenitud el poeta poliédricamente humano, absoluto, paradójicamente lógico-racional y al mismo tiempo 9 DE CIEMBRE 2014 - 12:01 AM
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Abraham Salloum Bitar | Foto: Cortesía


RAFAEL RATTIA

“En este libro se descubre a plenitud el poeta poliédricamente humano, absoluto, paradójicamente lógico-racional y al mismo tiempo sentimental”


Me gustaría pensar que este libro, post morten, del inmenso poeta Abraham Salloum Bitar, es uno más de su vasta e inagotable obra literaria que dejó para la posteridad a sus fervientes lectores, pero temo que tal vez no sea así y quizás sea el último.
Gracias a la Fundación que lleva su nombre es posible que sus devotos lectores –que son legión– accedamos a la gozosa experiencia de lectura de sus artículos de opinión en las páginas de la prensa de la región que lo acogió durante tantos años como un hijo ilustre, nunca declarado oficialmente pero sí tenido por la ciudad y sus ciudadanos como tal. ¡Enhorabuena!
Nunca un Prólogo hubiera hecho tanta justicia como este que se consigna aquí en las memorables páginas  de “Escuela de dudas” como el escrito –magistralmente hay que acotar– por Adonis Salloum Bitar.
En este libro se descubre a plenitud el poeta poliédricamente humano, absoluto, paradójicamente lógico-racional y al mismo tiempo sentimental; por estas 268 vibrantes páginas rielan el corazón y la razón sensible y sensitiva del poeta amado y venerado por sus iguales que viven, sufren y padecen una nación que no ha sabido estar a la altura de sus poetas y en no pocas ocasiones le ha dado la espalda a su tradición.
Nos dice Adonis Salloum que los textos postreros que recogen las páginas de “Escuela de dudas” … “describen con puntualidad de asceta desde los hechos parroquiales de la existencia mezquina y menuda de la provincia venezolana, esa ciudad de Angostura (Ciudad Bolívar), en la que se alimenta la ignorancia revestida de “cultura”; ese mismo ámbito donde conviven el presupuesto de la ignorancia y la ampulosa costumbre de los homenajes, (…) hasta la crónica urbana del crimen y de la impunidad que se vive en sus calles”. (p.11)
¿Cuáles son los derechos de la duda, esa hermana menor de la desesperanza? ¿Más aún: tiene acaso la duda pertinencia de legitimidad en el ámbito de la creación poética en Venezuela? ¿Se puede escribir poesía, en prosa o en verso, poco importa en realidad, desde lo que nuestro gran filósofo Juan Nuño denominaba con irrecusable acierto “la escuela de la sospecha”?
El poeta Abraham deja constancia testamentaria en la ventana de papel que fueron las páginas impresas del “Correo del Caroní hoy antologadas en esta hermosa “Escuela de dudas” y, con una inigualable pedagogía de la ciudad “desenmascara a personajes grotescos de la picaresca local y denuncia a otros actores revestidos de poderes extraterrenos que ocupan la palestra nacional e internacional”.
La fulgurante prosa ensayística de Abraham Salloum deja digna constancia para la posteridad su valiosa voluntad de recusación desacralizadora del tinglado institucional educativo “que fabrican la ignorancia en el interior de sus aulas” puesta al descubierto por el incisivo estilete de la ironía y la perplejidad implacable del admirable hombre de letras.
Como los prosistas emblemáticos más destacados de la pasada centuria, como los moralistas franceses e ingleses, verbigracia Chamfort, Swift; Abraham, dueño plenipotenciario de una mordaz y finísima ironía que descalabraba los rutilantes prestigios individuales e  institucionales de ciertas verdades sacrosantas que servían de coartadas a la moral acartonada y con olor a naftalina de personajillos de la farsa de triste recordación que coparon y en cierto modo aun pueblan el infumable proscenio del escenario cultural venezolano.
Nada de lo humano le fue ajeno al poeta. Como al antiguo sofista Protágoras de Gorgias, sus angustiantes preocupaciones estéticas e intelectuales, sus lacerantes cavilaciones de irreductible lector, le condujeron a dibujar y tejer un tapiz exacto y demoledor de la sociedad de su época con su abyección y sacralidad, sin evadir los quemantes desafíos éticos de su tiempo.


jueves, 4 de diciembre de 2014

Premio Internacional de Literatura cayó en Argentina


EL VIII CONCURSO LITERARIO INTERNACIONAL “ÁNGEL GANIVET” (HELSINKI, FINLANDIA) DECLARA GANADOR A UN ESCRITOR ARGENTINO


Por Salomé Guadalupe Ingelmo


Tras la selección y deliberaciones sobre los textos presentados, el jurado ha decidido conceder el Premio “Ángel Ganivet” 2014 en su modalidad de prosa a El estilista, del escritor argentino Osvaldo Gallone. El galardón ha sido recogido por el embajador argentino en Finlandia, Don Roberto Daniel Pierini, encargado a su vez de leer las palabras de agradecimiento enviadas por el autor, cuyo desplazamiento hasta Helsinki en dicha fecha resultó finalmente imposible.
La organización del evento ha advertido un notable aumento sobre la participación, que ya venía siendo muy alta, advertido en la presente edición del certamen. Se han contabilizado 1273 trabajos recibidos, enviados por participantes de 31 nacionalidades ‒Alemania, Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, Cuba, Chile, Ecuador, El Salvador, España, Estados Unidos, Filipinas, Francia, Grecia, Guatemala, Holanda, Honduras, India, Italia, Marruecos, México, Nicaragua, Perú, Polonia, Puerto Rico, República Dominicana, Rusia, Suiza, Uruguay y Venezuela‒ desde un total de 36 países de residencia repartidos por todo el mundo ‒Alemania, Argentina, Bélgica, Brasil, Canadá, Catar, Colombia, Costa Rica, Cuba, Chile, China, Ecuador, El Salvador, España, Estados Unidos, Filipinas, Francia, Guatemala, Holanda, Honduras, Israel, Italia, Marruecos, México, Nicaragua, Panamá, Perú, Puerto Rico, Reino Unido, República Dominicana, República Checa, Suecia, Suiza, Uganda, Uruguay y Venezuela‒.
Siguiendo un bien asentado ritual, el fallo del Concurso Literario Internacional “Ángel Ganivet”, convocado por la Asociación de Países Amigos, se ha hecho público durante la entrega de premios organizada en las dependencias que la Unión Europea tiene en el centro de Helsinki. El evento, sin duda el acto público relacionado con la lengua y literatura hispana más señalado en el calendario finlandés, cerró la Semana Cultural en la tarde del 27 de noviembre ante numerosos asistentes. Estuvieron presentes reputados representantes del ámbito académico y de distintos estamentos del mundo cultural finés e iberoamericano, a la par que una nutrida representación de la cosmopolita sociedad que reside en la ciudad. Asistieron también, como viene siendo habitual, destacados representantes del cuerpo diplomático acreditado en Helsinki: embajadores y otros representantes de países hispano hablantes como Argentina, México, Chile, España y Venezuela, entre otros.
Durante el acto también se ha presentado al público el retrato en óleo sobre lienzo de Osvaldo Gallone, realizado para la ocasión por el retratista español Alejandro Cabeza. La obra forma parte del premio con el que la Asociación de Países Amigos rinde homenaje al ganador del certamen. El pintor, que cuenta con tres décadas de experiencia profesional a sus espaldas, ha desarrollado en los últimos años una intensa labor retratística centrada en la figura de personajes consagrados del mundo de la cultura, muy especialmente iconos de la literatura hispana, que se ha materializado ya en cerca de cuarenta obras. Varios de sus retratos están expuestos permanentemente en edificios oficiales o forman parte de los fondos de diversas instituciones, organismo y centros públicos, como el Círculo de Bellas Artes de Valencia, el Gobierno Militar de Valencia, la Excelentísima Diputación Provincial de Valencia (retrato de D. Fernando Giner, Presidente de la Diputación de Valencia), el Excelentísimo Ayuntamiento de Barcelona, el Excelentísimo Ayuntamiento de Valencia o el Ilustre Colegio de Notarios de Valencia (retrato de D. Joaquín Borrell), entre otros. Uno de sus cuadros forma parte de la Colección Museo de la Ciudad de Valencia, y otros dos están en el Museo Vicente Blasco Ibáñez (uno, su famoso retrato del reputado escritor). Dos de sus cuadros, sendos
retratos de los escritores Alejo Carpentier y Nicolás Guillén, se exponen permanentemente en la prestigiosa Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba. Su retrato de la escritora doña Ana María Matute forma parte de los fondos de la Real Academia Española de la Lengua.
El texto ganador del VIII Certamen Literario Internacional “Ángel Ganivet”, de impecable factura, aborda un argumento harto doloroso: el genocidio perpetrado por los nazis en los campos de exterminio, en concreto en Treblinka. El estilista se revela un texto duro y alejado de los prejuicios y tópicos a menudo ligados a este argumento. Exento también de fáciles sentimentalismos, incluso marcado por un cáustico sentido del humor que, manejado con maestría y prudencia, se muestra un excelente revulsivo para remover conciencias. Porque El estilista constituye un efectivo alegato contra la intolerancia y la violencia, contra la brutalidad y el salvajismo; a favor de la belleza y la bondad, esos dos conceptos, junto a la verdad, indisolublemente unidos para los filósofos griegos.
Además, el jurado ha decidido distinguir por su calidad a diecinueve textos finalistas. Éstos han abordado argumentos y géneros de la más variada índole. En la edición de este año se advierte, eso sí, una marcada presencia del terror entre los relatos que han logrado entrar en la lista de finalistas. Un terror refinado y esencialmente alegórico que los ha hecho merecedores de reconocimiento  Excelente texto de misterio centrado en la brujería, pero que al tiempo encierra un firme mensaje anticolonialista y antimilitarista en el caso de Marcha de algodones ‒Roberto de Bianchetti (Argentina)‒. Terror que podríamos calificar de existencial en el caso de Jaque mate ‒Magnus Dagon, nombre artístico de Miguel Ángel López Muñoz (España)‒, donde el protagonista juega una partida de ajedrez contra un misterioso oponente invisible cuyo control sobre su vida, a la que va desposeyendo de piezas sin piedad, evoca una partida con una entidad superior, ya sea dios o el destino. Terror cotidiano en Gretel ‒María Jesús Andrés Miguel (España)‒, donde las insidias que se ciernen sobre la infancia ‒quizá actualmente demasiado descuidada, con la que los adultos ya apenas comparten juegos‒, incluso tras apariencias inocentes, cobran protagonismo. Pero como decíamos los casos han sido muy variados, y por ello entre los finalistas también encontramos textos especialmente simbólicos como Los condenados ‒Javier Quevedo Arcos (España) ‒, reflexión sobre la incomunicación y la indefensión del ser humano ante el sino, o Ciudad sin alas ‒Genrri Wilian Martínez Jerez (Cuba)‒, tierno alegato en favor de la libertad del individuo. Igualmente han tenido cabida en esa lista de finalistas textos de naturaleza más costumbrista, cotidiana e intimista, con argumentos tan variados como: el modo en el que la tragedia de las drogas afecta a las familias ‒Slow motion, Horacio Martín Rodio (Argentina)‒, la rebelión de aquellos que son considerados perdedores y por ello menospreciados y humillados por los individuos de éxito ‒El secreto de la masa madre, Miguel Ángel Gayo Sánchez (España)‒, la violencia de género ‒Te lo dije… Te lo dije, Fernando Francisco Medeot (Argentina) ‒, los recuerdos sobre la Guerra Civil Española ‒Golfín, Monserrat Pis Marcos (España)‒, los problemas mentales y los conflictos que éstos generan en el seno de la familia ‒Carne, David Betancourt (Colombia)‒… Y así hasta diecinueve meritorios textos y otros tantos autores.

El relato ganador  puede leerse (http://www.paisesamigos.com/premios_pdf/ganador_2014.pdf), junto con un comentario pormenorizado del mismo (http://www.paisesamigos.com/otros/analisis_ganadora2014.pdf), en la propia Web de la asociación convocante.
El acta de fallo se puede consultar aquí (http://www.paisesamigos.com/noticiasconcursoviii.html).

Como siempre, la Asociación de Países Amigos desea agradecer su confianza a todos los participantes y les emplaza a presentar sus obras en la próxima edición del certamen, que estará limitada a la categoría de Poesía.

Salomé Guadalupe Ingelmo
Coordinadora del VIII Concurso Literario Internacional “Ángel Ganivet”